El hecho fue denunciado esta mañana, tres horas después de que habría ocurrido. Los delincuentes habrían actuado armados. Interviene el fiscal Mariano Moyano.
La Justicia investiga si un grupo de delincuentes robó medio millón de dólares una casa del barrio Parque Luro, con el extraño detalle de que las víctimas denunciaron el hecho unas tres horas después y, en un comienzo, se negaron a colaborar con la investigación.
La causa penal formada por el hecho quedó a cargo del fiscal Mariano Moyano y el personal de la comisaría séptima, quienes tomaron declaración a la víctima y notaron incongruencias en el relato.
Según lo denunciado, cerca de las 9 de la mañana de este martes un grupo indeterminado de delincuentes saltó el alambre de púas perimetral que tiene en su casa de Valencia al 5300 e ingresó por los fondos de la propiedad.
En ese contexto, el hombre y su esposa fueron sorprendidos y amenazados con armas de fuego, por lo que, según dijo, no tuvo más remedio que entregarle una importante suma de dinero que tenía en el lugar. Conforme pudo saber LA CAPITAL, en un principio la pareja presuntamente dio a los ladrones un millón de pesos y 800 dólares para que éstos se fueran con ese botín. Sin embargo, de acuerdo a lo que denunciaron ante la policía, los delincuentes habrían exigido la entrega de todas las divisas que había en el lugar, al mostrar que tenían conocimiento de que allí se atesoraba un relevante monto cobrado por una supuesta herencia. Ese es un dato importante en la pesquisa, dado que, según dijeron las personas asaltadas, solamente sabían de ello unas pocas personas de su entorno más íntimo.
Es en esa línea que el relato de las víctimas indica que habrían huido una vez logrado su cometido, con aproximadamente medio millón de dólares.
Siempre según esos testimonios, los ladrones actuaron con velocidad y sin lesionar a nadie, pero ataron a la pareja con cables hallados en el inmueble. También sospecha, el matrimonio de jubilados, que podrían haber dormido en el parque la noche anterior, ya que el pasto se hallaba aplastado. En tanto, fue denunciado además que se llevaron cinco teléfonos celulares y un reproductor móvil de música.
Lo llamativo, para los investigadores, es que el hombre, a pesar de que supuestamente le robaron medio millón de dólares, tardó más de tres horas en llamar a la policía y recién denunció el hecho a las 12.30 del mediodía. De todos modos las víctimas aseguraron que estuvieron atadas en sus habitaciones y que recién pudieron llamar cuando se desataron.
Conforme explicó el hombre, de 64 años, el dinero que tenía en la casa provenía de una herencia que había cobrado “hacia un tiempo”.
Otro de los puntos más “curiosos”, es que la víctima se negó, en un comienzo, a que personal de Policía Científica entrara en su vivienda para realizar pericias y levantar huellas que puedan servir para identificar a los delincuentes. Finalmente los peritos pudieron trabajar en el lugar.
El fiscal Moyano ordenó, de todas formas, una serie de pericias, como por ejemplo el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona y la toma de testimonio de vecinos y allegados.